El Cierre de las Noticias
AM – CUMBRE 1400
Por Lic. Santiago Montórfano
Va de suyo que quien escribe las reglas obtiene mayores posibilidades de ganar el juego. A ningún contendiente le da igual la cantidad de fotos que luzca la pantalla táctil para elegir gobernador en 2023. De esa cantidad depende en buena medida y “céteris páribus” el resultado de la elección. Todos pujan por influir en el diseño de la oferta electoral.
La interdependencia de los actores es plena y por momentos de resultados impredecibles. Aunque se puede admitir una regla general: a mayor atomización de la oferta, mayores posibilidades para los partidos con pisos electorales cuantiosos y estables. Por el contrario, a mayor polarización, el peso relativo de aquellos pisos cede y la disputa se traslada a la obtención de votos “nuevos” y genuinos que eleven los techos. En este último escenario, sin “divide y reinarás”, no bastan las escuetas mayorías simples para alcanzar el primer premio. La disputa comienza a parecerse más a un ballotage, y el camino a la victoria exige la obtención de mayorías abultadas cuando no absolutas.
Así las cosas, veamos…
El MPN avanza en la instalación de la proclamada fórmula Koopmann – Pechén y dilata la decisión sobre la fecha de los próximos comicios. Al mismo tiempo prefiere y actúa en consecuencia, un escenario lo más atomizado posible. La oposición, debate la coyuntura y se divide en torno a su alternativa más evidente: se es colectora de Rolando o se encara con fórmulas genuinas en una suerte de purismo metodológico Durán-Barbista.
Entre los primeros, hoy se cuenta un acuerdo casi sellado entre el Pro Neuquino y el exiliado emepenista. El acuerdo incluye el aval de dirigentes nacionales de primera línea y se habría decidido en Buenos Aires. La contracara del acercamiento implica, puertas adentro de Juntos por el Cambio, la deserción de algunos dirigentes de peso como Carlos Eguía y la probable resignación de la candidatura de Pablo Cervi.
Por parte del Frente de Todos, el panorama se asemeja. Varios espacios del elástico frente ya manifestaron intenciones dialoguistas con Figueroa. La Comisión de Acción política lanzada al ruedo por el Justicialismo Neuquino, aduce la tradición frentista del peronismo como sustento de un posible cóctel electoral Figueroa – Perón.
El decante, con cierta lógica política, depende en buena medida de la decisión que tomen dirigentes aun sinuosos, como Oscar Parrilli, Ramón Rioseco y Darío Martínez. Por su parte el Movimiento Evita referenciado en Marcelo Zúñiga y el Frente Grande conducido por Soledad Martínez, se muestran más cerca del transversal intento de derrotar al MPN-Ok.
De las definiciones a veces simultáneas que tomen cada uno de los actores, dependerá si el tablero cuenta con tres, cuatro o más candidatos a gobernador. Armado el escenario, el resto dependerá del electorado. Si reparte su adhesión en forma más o menos equilibrada, o si polariza su voluntad con relativa independencia de lo que la dirigencia ofrezca en la varieté de candidaturas. De todo ello, depende en buena medida, quién gobierne la fecunda tierra Vaca Muerta entre 2023 y 2027, si el oficialista Marcos Koopmann o su retador, Rolando Figueroa.
